Todos los dueños de perros están expuestos a la saliva de su perro en un momento u otro, ya sea a través de lamidas cariñosas o mordidas. La expresión “la boca de un perro es más limpia que la boca de un humano” rápidamente viene a la mente. ¿Pero es éste realmente el caso?Según científicos y expertos caninos, la respuesta es, lamentablemente, no.
De hecho, la boca y la saliva de los perros contienen naturalmente muchas bacterias. Si bien estos no presentan un problema para el animal, pueden, en algunos casos, ser peligrosos para los humanos cuando entran en contacto con su sangre. Descubra qué son estas bacterias, cuáles son los riesgos para los humanos, los factores agravantes y las acciones correctas a tomar si una herida se infecta.
¿Por qué la saliva de los perros no es más limpia que la nuestra?
Sabes que tu perro usa la lengua todos los días, ya sea para comunicarse, explorar su entorno o para lamerse. De hecho, lamer es esencial para el animal porque participa en su modo de comunicación y comprensión. Sin embargo, los perros tienden a lamer muchas cosas.
Como resultado, la saliva de los perros contiene una gran cantidad de bacterias. Por supuesto, el cuerpo de cada ser vivo contiene miles de millones de bacterias: contribuyen al bienestar, la digestión y la preservación del sistema inmunológico. Pero mientras que algunos se usan para el cuidado normal de la boca y todo el cuerpo de tu perro, otros son potencialmente peligrosos para los humanos.
La bacteria más famosa que puede ser peligrosa para los humanos y muy común en la boca de los perros es Capnocytophaga canimorsus. Presente de forma natural en la saliva de los perros, pero también de los gatos y los humanos, puede causar infecciones graves en los humanos si entra en su torrente sanguíneo a través de una mordida o lamiendo una herida. La peligrosidad de esta bacteria es nula para el animal porque procede de forma natural de su cuerpo. Pero, por otro lado, cuando se saca de este contexto, presenta un riesgo importante y puede convertirse en un patógeno.
Los investigadores también han descubierto que los perros tienen otro tipo de bacteria llamada Porphyromonas gulae, que puede causar enfermedad periodontal. Los humanos tenemos una cepa diferente de esta bacteria llamada Porphyromonas gingivalis.
Además, otros investigadores de Harvard han encontrado más de 615 bacterias diferentes en la boca humana, en comparación con 600 en los perros. Esta ligera diferencia puede haber reforzado el mito de que la saliva de los perros es más limpia que la nuestra, pero eso sería comparar manzanas con naranjas. Esto se debe a que la boca de los perros y los humanos está llena de gérmenes, pero estos tipos de bacterias son diferentes. Entonces, en esencia, se podría decir que la saliva de un perro es tan sucia como la nuestra.
¿Cuáles son los riesgos de contraer enfermedades por un beso de perro?
Como humanos, nuestra piel nos protege de infecciones formando una barrera natural contra la gran mayoría de virus, bacterias y microorganismos de todo tipo. Sin embargo, las bacterias pueden pasar a nuestra sangre y propagarse por todo nuestro cuerpo una vez que tenemos una herida. El perro nos lo puede transmitir por tanto por un mordisco que atraviesa la piel, por rasguños que le provocan sangrado, o incluso por un lametón sobre una herida sin cicatrizar.
La bacteria que se encuentra más comúnmente en la boca de un perro es Pasteurella canis. Además, como se mencionó anteriormente, los perros pueden transmitir la bacteria Capnocytophaga canimorsus a través de una mordedura, lo que puede provocar una infección bacteriana grave en los humanos. Además, el virus de la rabia es la infección más grave que los perros pueden transmitir a través de su saliva.
Por otro lado, un perro puede comer alimentos contaminados con Salmonella o E. coli, y estos patógenos podrían transmitirse a los humanos si la baba del perro entra en su boca.
¿Existen factores agravantes en la saliva del perro?
Parece que ciertos factores se agravan en el caso de contacto con ciertas bacterias a través de la saliva de un perro:
- Estar inmunocomprometido: Un organismo debilitado será menos capaz de defenderse naturalmente contra ataques externos y por lo tanto será más vulnerable a las bacterias.
- Niños menores de cinco años o adultos mayores de 65: Estos grupos de personas son más vulnerables a las infecciones.
- Tener heridas o lesiones: Las heridas y lesiones son puertas de entrada para las bacterias, que pueden ingresar al torrente sanguíneo a través de ellas.
¿Qué hacer si sospecha una infección?
El riesgo de contraer bacterias peligrosas a través de la saliva de un perro es bastante bajo en individuos sanos. Sin embargo, si un perro lo muerde profundamente o le lame una herida, lave inmediatamente la lesión con agua limpia y jabón para desinfectarla completamente. Luego, busque atención médica, sin importar cuán pequeña pueda parecer la herida.
Consejos: Para evitar cualquier tipo de infección, lávese bien las manos después de tocar a su perro, pero también las partes de su cuerpo (brazos, piernas, cara) que tenga. lamió Evite tocar a un niño, una persona debilitada y alimentos después de dicho contacto, sin lavarse previamente. Por último, no dejes que tu perro te lama la cara ni la piel dañada.
Cómo mantener limpia la boca de tu perro
No puedes eliminar todas las bacterias de la boca de tu perro, pero puedes mejorar su higiene bucal con algunas acciones:
- Cepille los dientes de su perro al menos dos veces por semana.
- Use pasta de dientes especialmente diseñada para reducir la placa.
- Regala alimentos elaborados para mejorar la salud dental del perro.
- Ofrezca golosinas dentales que tengan el sello de aceptación del Consejo Veterinario de Salud Oral.
- Programa limpiezas dentales veterinarias periódicas.
Pensamientos finales: limpieza de la boca del perro
La saliva de tu amado perro ciertamente no es más limpia que la tuya, pero las bacterias que contiene generalmente no son dañinas para las personas sanas. Sin embargo, en algunos casos, es posible contraer enfermedades graves a través de la saliva de los perros, pero este riesgo sigue siendo bajo. Aún así, es mejor evitar los grandes besos con tu perro y lavarte las manos después de cada manipulación. Pero, como amantes de los perros, ¡sabemos que es mucho más fácil decirlo que hacerlo!