¿Se puede tratar un quiste sebáceo en un gato? Síntomas, Causas, Tratamiento & Prevenciones

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¿Se puede tratar un quiste sebáceo en un gato? Síntomas, Causas, Tratamiento & Prevenciones
¿Se puede tratar un quiste sebáceo en un gato? Síntomas, Causas, Tratamiento & Prevenciones
Anonim

Si te has dado cuenta de un bulto mientras acaricias a tu gatito, es muy posible que se trate de un quiste sebáceo, ya que son bastante comunes en los gatos. Suelen identificarse como masas redondas, firmes, que pueden contener líquido y están formadas por un folículo piloso obstruido. Aunque generalmente no son dolorosos, pueden infectarse con el tiempo, especialmente si su gato está constantemente lamiendo o rascando el área. Entonces, ¿se puede tratar un quiste sebáceo?

Sí, hay varias maneras de tratar a su mascota. Drenar el quiste puede ser beneficioso, pero generalmente se requiere extirpación quirúrgica para evitar que el quiste se vuelva a llenar. Debe evitar tratar el quiste sebáceo usted mismo porque puede provocar una respuesta inflamatoria en el tejido cercano.

¿Cómo sé si mi gato tiene un quiste sebáceo?

Los quistes sebáceos a menudo aparecen en la cabeza, el cuello, el torso o la parte superior de las piernas y se distinguen por una sola protuberancia que puede ser blanca o ligeramente azul. Los sacos llenos de líquido suelen ser benignos, lo que significa que no son cancerosos y no causan molestias físicas a tu gato. Si el quiste revienta, puede supurar una secreción de color blanco grisáceo, parduzco o parecida al requesón. Cuando esto sucede, la herida puede infectarse y requerir tratamiento adicional.

Los quistes sebáceos pueden comenzar como pequeños parches de piel elevados en su gato y pueden ser difíciles de detectar en las primeras etapas debido a la densidad del pelo de su gato. Los quistes se vuelven más visibles a medida que aumentan de tamaño, se llenan de líquido y luego revientan, o tu gato se siente irritado y rasca el área constantemente.

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¿Qué causa el desarrollo de un quiste sebáceo?

Las glándulas sebáceas microscópicas rodean todos los poros y folículos pilosos de la piel de tu gato. Estas glándulas producen sebo que protege e hidrata el cabello y la piel y le da su pelaje brillante. Un quiste sebáceo puede formarse cuando un poro normal o un folículo piloso se obstruye. La suciedad, las infecciones, el tejido cicatricial o incluso el sebo normal que se vuelve demasiado espeso para salir de la abertura del poro pueden causar una obstrucción.

Cuando esto ocurre, el sistema inmunitario de tu gato hace que los tejidos circundantes bloqueen el daño, formando una pequeña bolsa que se llena gradualmente de queratina, que es una sustancia amarillenta que se encuentra en las uñas y el pelaje. Con el tiempo, el líquido se llena cada vez más. El relleno hace que el quiste deje de crecer en algunos gatos; en otros, el quiste crece hasta que se rompe y sale líquido.

Diagnóstico de un quiste sebáceo

Su veterinario puede sospechar que su mascota tiene un quiste, pero generalmente se requiere una biopsia y un examen microscópico del tejido para un diagnóstico definitivo. Lo más probable es que evalúen la masa según el color, el tamaño, la consistencia y si crece en el tejido subyacente o si solo se siente en la piel. Un aspirado con aguja fina y una citología son procedimientos comunes realizados por su veterinario. Se utiliza una pequeña aguja para extraer una muestra de células de la masa, que un patólogo envía a un laboratorio para su análisis. Para confirmar que el quiste no es canceroso, a veces se requiere una biopsia quirúrgica para extirpar la masa completa o una parte de ella para su análisis.

Debe darle a su veterinario un cronograma aproximado de la aparición de los quistes y cualquier cambio o crecimiento notable.

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Tratamiento de un quiste sebáceo

Los quistes sebáceos se pueden tratar de varias formas, desde conservadoras hasta agresivas. Los quistes sebáceos no afectan a muchos gatos y no causan molestias ni interfieren con su vida diaria. En casos menos agresivos donde los quistes han permanecido del mismo tamaño, su veterinario puede recomendar dejar el quiste intacto siempre y cuando no moleste a su gato.

La extirpación quirúrgica de los quistes es un tratamiento común. Su gato estará sedado y se usarán puntos de sutura para juntar la piel sobre el área extirpada. El tratamiento con láser, si está disponible, es beneficioso para los quistes de las glándulas sudoríparas. Múltiples quistes foliculares pequeños pueden beneficiarse del tratamiento tópico, mientras que otros procedimientos pueden ser necesarios para tratar las causas subyacentes.

Su gato tiene buenas posibilidades de recuperarse de la eliminación de los quistes sebáceos, que por lo general no afectarán la salud o la esperanza de vida a largo plazo de su mascota.

¿Cómo puedo mantener segura a mi mascota?

Es fundamental que tu mascota se abstenga de frotar, rascar, lamer o morder el quiste, ya que esto puede provocar inflamación, infección y sangrado. Si el quiste se abre, debe mantenerse limpio y es posible que su mascota deba usar un vendaje protector sobre el área afectada hasta que sane.

El sitio de la incisión debe mantenerse limpio y seco después de la cirugía, y es importante que su mascota no interfiera con la herida. Cualquier hinchazón, sangrado o pérdida de sutura debe informarse a su veterinario.

Cuidar la piel y el pelaje de su mascota según las indicaciones de su veterinario puede ayudar a reducir la formación de quistes sebáceos, y puede ayudar a evitar los quistes asegurándose de que su gato viva en un ambiente limpio. Esto también incluye mantener limpia la caja de arena de su gato.

Si cepilla a su gato con regularidad, podrá detectar los quistes a medida que se forman, y luego podrá vigilarlos y llevar a su gato al veterinario si el quiste crece o cambia. Asegúrate de hablar sobre el cuidado de la piel de tu gato, ya que bañarse en exceso puede ser tan malo como no bañarse lo suficiente.

Conclusión

En la mayoría de los casos, los quistes sebáceos son inofensivos si son pequeños, están cerrados e intactos, y no se requiere tratamiento. Sin embargo, si se toma la decisión de hacer una biopsia del quiste, generalmente se extirpa quirúrgicamente. Si su gato desarrolla quistes recurrentes o múltiples, es posible que se requiera una investigación de diagnóstico para determinar la causa subyacente. No se recomienda drenar el quiste de su gato usted mismo; La atención veterinaria es siempre la opción más segura. Asegúrese de revisar la piel de su gato en busca de signos de quistes o protuberancias con regularidad, y mantenga su entorno y su piel limpios lo mejor que pueda.

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