Cada año se diagnostica diabetes a un número creciente de gatos, y la enfermedad se está volviendo demasiado común. La diabetes ocurre cuando hay una deficiencia de insulina en el cuerpo de un gato o cuando el cuerpo no responde a la insulina de la forma en que se supone que debe hacerlo. Puede ocurrir en cualquier gato a cualquier edad, pero no Hay un par de factores que pueden aumentar el riesgo de que un gato desarrolle diabetes, incluida la edad, el sexo y la raza.
Lamentablemente, a menudo no existe una cura para esta enfermedad, pero hay opciones de tratamiento disponibles, y su gato puede vivir una vida relativamente normal si su condición se controla bien. Siga leyendo para obtener más información sobre la diabetes, cómo puede afectar la calidad de vida de su gato y cuáles son los riesgos de desarrollarla.
Antes de empezar
Antes de entrar en las posibles causas de la diabetes, es importante conocer los dos tipos, que son diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2. La diabetes tipo 1 es cuando el páncreas no produce suficiente insulina, lo que hace que los niveles de glucosa en la sangre sean altos. La diabetes tipo 2 es cuando el cuerpo responde a la insulina de manera anormal, lo que también resulta en niveles altos de glucosa. El último tipo es el más común de los dos.
Algunos recursos también se refieren a la diabetes tipo 3 y esto incluye la diabetes debida a medicamentos que actúan contra la insulina, como los glucocorticoides, o enfermedades como los tumores pancreáticos.
Todos los tipos de diabetes pueden poner en peligro la vida si no se tratan y controlan adecuadamente. Por esta razón, es importante estar atento a los signos de diabetes y hacer una cita con su veterinario si tiene alguna inquietud. Los signos comunes de la diabetes mellitus incluyen aumento de la sed, aumento de la micción e inicialmente aumento del apetito con pérdida de peso.
¿Cómo contraen diabetes los gatos?
1. Obesidad
La obesidad es una de las principales causas de diabetes porque contribuye a que el cuerpo de tu gato sea menos sensible a la insulina. Lo que pones en el cuerpo de tu gato es importante porque afectará su salud y peso. Las dietas ricas en carbohidratos y calorías suelen ser más accesibles y asequibles, pero se descomponen en glucosa. Cualquier exceso de calorías se almacena como grasa, tal como ocurre con los humanos. El tejido graso o adiposo como también se le conoce no es un tejido benigno. En realidad, es responsable de promover la inflamación y los cambios metabólicos. El resultado final es la resistencia a la insulina.
Prevenga la obesidad y, en última instancia, la diabetes en su gato manteniendo la ingesta calórica recomendada para su edad, nivel de actividad y peso. Busque comida para gatos de alta calidad que sea baja en calorías y rica en proteínas y humedad. Además, reduce las golosinas.
En algunos casos, la diabetes se puede revertir si se trata de inmediato, los niveles de glucosa en sangre se controlan estrictamente y se combinan con una pérdida de peso controlada.
2. F alta de ejercicio
La f alta de ejercicio suele ir de la mano con la obesidad. Los gatos que viven en el interior y prefieren comer y dormir la siesta todo el día corren el riesgo de desarrollar diabetes. El ejercicio es esencial para tu gato porque desarrolla músculos y quema energía, pero eso no significa que debas llevarlo a correr, solo significa que debes hacer que se mueva por la casa varias veces al día.
Puedes implementar tareas simples en la rutina diaria de tu gato que lo harán levantarse y caminar, como colocar su plato de comida en las escaleras, para que tenga que subir y bajar cuando quiera comer. Jugar con tu gato es otra forma de quemar energía y moverse mientras construyen su vínculo y pasan un buen rato juntos. Use láseres o juguetes de plumas para que los persigan y deje algunos juguetes interactivos en la casa con los que puedan jugar cuando no esté cerca.
3. Género
Desafortunadamente, algunos gatos están predispuestos a la diabetes desde el nacimiento simplemente por su sexo biológico. Los gatos machos tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad, especialmente si están castrados, ya que naturalmente tienen una menor sensibilidad a la insulina que las gatas. Sorprendentemente, entre el 60 % y el 70 % de los gatos con diabetes son machos castrados.
Si tienes un gato macho, es importante que le des una dieta adecuada y que haga mucho ejercicio. También es necesario llevar a su gato a chequeos médicos regulares, donde su veterinario le hará pruebas para detectar diabetes.
4. Pancreatitis crónica
La pancreatitis es una condición de salud por la cual el páncreas se irrita e inflama y puede ser causada por la obesidad, ciertos medicamentos, una infección y condiciones de salud subyacentes. Los signos de pancreatitis son vómitos, diarrea, pérdida de peso y dolor abdominal. El páncreas es responsable de producir enzimas digestivas, así como insulina, la hormona que ayuda a regular el azúcar en la sangre.
Cuando un gato tiene pancreatitis, el órgano no puede producir insulina como debería o en absoluto, lo que puede causar que se desarrolle diabetes.
5. Ciertas drogas
La medicación es necesaria para tratar ciertas enfermedades en los gatos, pero a veces tienen efectos secundarios complicados. Ciertos medicamentos recetados pueden causar diabetes en gatos predispuestos, como los glucocorticoides, que son esteroides que tratan el asma felina y otras afecciones inflamatorias.
Si su gato necesita tomar glucocorticoides, asegúrese de seguir las pautas cuidadosamente y no abusar del medicamento. A pesar de lo beneficioso que pueden ser estos esteroides, el uso a largo plazo puede aumentar el riesgo de supresión inmunológica, obesidad, pancreatitis y enfermedad suprarrenal.
6. Ciertas razas
Hay algunas razas de gatos que parecen estar predispuestas a la diabetes, como el gato birmano, el azul ruso, el gato del bosque noruego, el tonquinés y el abisinio. Estas razas tienen una predisposición genética a la diabetes y, para cuidar mejor a tu gato, es importante conocer esta afección para poder cuidarlo adecuadamente.
Considere obtener un seguro para mascotas si tiene una de estas razas para ayudar a cubrir las facturas del veterinario si desarrollan diabetes. Además, manténgase al tanto de los controles de salud regulares de su gato, ya que detectar esta enfermedad a tiempo le brinda a su gato la mejor oportunidad de vivir una vida relativamente normal.
7. Edad
La La diabetes puede desarrollarse en un gato de cualquier edad. Sin embargo, a medida que envejecen, aumenta el riesgo de desarrollar diabetes. Entre el 20 % y el 30 % de los gatos a los que se les diagnostica esta enfermedad tienen entre 7 y 10 años, mientras que entre el 55 % y el 65 % de los gatos diagnosticados tienen 10 años o más.
Los gatos mayores se benefician de una buena dieta, un peso saludable y ejercicio, lo que puede reducir el riesgo de desarrollar diabetes. Es probable que no puedan correr como antes debido al dolor en las articulaciones, pero aún puedes alentarlos a que muevan el cuerpo de manera suave.
Signos de diabetes en gatos
Al principio, puede ser difícil detectar cambios en la rutina de sus gatos, por lo que es tan importante llevarlo a revisiones periódicas. Sin embargo, si le preocupa la salud de su gato, puede estar atento a estos síntomas:
- Aumento de la sed
- Aumento de la micción
- Orinar fuera de su caja de arena
- Pérdida de peso
- Debilidad
- Aumento del apetito
- Vómitos
- Mala calidad del pelaje
- Síntomas neurológicos
Los primeros signos de diabetes en su gato son un aumento de la sed y la micción. Aunque sorprende para un gato enfermo, la diabetes también provoca un aumento del apetito porque su cuerpo no recibe los nutrientes que necesita.
Si la diabetes no se trata, los síntomas pueden empeorar mucho y tu gato se deshidratará, se deprimirá, perderá el control de sus funciones motoras, entrará en coma y eventualmente morirá.
La diabetes generalmente no es curable, pero algunos gatos pueden entrar en remisión si se someten a cambios en el estilo de vida y la dieta. Los gatos pueden permanecer en remisión durante meses e incluso años, pero la enfermedad no suele curarse, solo se controla.
¿Existe tratamiento?
Además de un cambio en la dieta y el estilo de vida, los gatos diagnosticados con diabetes deberán ser monitoreados y recibir tratamiento por el resto de sus vidas. El tratamiento para diabéticos incluye insulina inyectable o medicamentos orales, un cambio a una dieta recetada baja en carbohidratos y un control estricto por parte de usted y su veterinario. Es probable que deba llevar a su gato diabético al veterinario cada 3 o 4 meses para un chequeo.
Aunque el tratamiento no librará a su gato de la diabetes, con suerte restaurará la glucosa en sangre de su gato a niveles normales que no sean demasiado altos ni demasiado bajos, controlará la pérdida de peso y minimizará sus síntomas.
La diabetes mal controlada puede provocar más complicaciones que pueden acortar su vida útil. Sin embargo, si su gato está en tratamiento y la enfermedad se controla bien, puede vivir una vida buena y larga. Su gato tiene más posibilidades si la enfermedad se detecta y se trata a tiempo.
Conclusión
No existe una causa simple para la diabetes, pero hay factores que pueden aumentar el riesgo de que un gato la desarrolle. La obesidad, la f alta de ejercicio e incluso la edad avanzada pueden poner a tu gato en riesgo de diabetes. La detección temprana de la enfermedad y el inicio rápido del tratamiento aumentarán las posibilidades de que su gato tenga una vida relativamente normal.