Los gatos y los humanos tienen una larga historia de convivencia. Esta relación se ha vuelto tan estrecha que a menudo se considera a los gatos como parte de la familia. Pero digamos que traes a casa un nuevo bebé.¿Tu gato sabe lo que es un bebé humano? Lo más probable es que no. Sin embargo, es posible que su gato reconozca a un bebé como un nuevo miembro de la casa y sienta curiosidad por él, incluso si no lo reconoce como un bebé per se. Aprendamos más.
La capacidad de reconocer a los bebés
Los gatos pueden estar familiarizados con la idea de los bebés en el hogar, pero es probable que carezcan de la capacidad de reconocer a un bebé como algo separado de los adultos. Los gatos dependen principalmente de su sentido de la vista y el olfato para identificar objetos, personas o animales. Los bebés se parecen lo suficiente a los adultos como para que los gatos no puedan diferenciarlos. La conclusión lógica es que es posible que los gatos ni siquiera se den cuenta de la presencia de un bebé en el hogar, simplemente lo reconocen como una nueva persona en el hogar.
El papel de los olores y las vistas
Los gatos pueden reconocer a las personas por su olor, pero los olores de los bebés siguen siendo nuevos y extraños para ellos. Además, los gatos dependen tanto de la vista como del olfato para identificar objetos. Los bebés se ven diferentes a los adultos debido a su tamaño más pequeño y sus diferentes rasgos faciales, pero es posible que muchos gatos no puedan reconocer estas diferencias. Sin embargo, pueden tener la sensación de tener más cuidado con este nuevo objeto solo porque sus personalidades naturales, cautelosas pero curiosas, toman el control. Se familiarizarán más con el bebé a medida que crezca y sabrán que pertenece a la casa al igual que las demás personas.
¿Pueden los gatos y los bebés coexistir pacíficamente?
Aunque es posible que los gatos no entiendan lo que es un bebé, aún pueden formar relaciones positivas con los bebés. Los gatos a menudo disfrutan de la atención adicional que proviene de jugar con los bebés o descansar alrededor de ellos. Con la supervisión adecuada, los gatos y los bebés pueden aprender a convivir en paz.
Mitos sobre gatos y bebés
Existen muchos mitos sobre los gatos y los bebés, incluido el de que los gatos pueden asfixiar a un bebé o chuparle el aliento. Por supuesto, esto no es cierto, ya que los gatos generalmente no entienden qué son los bebés o cómo interactuar con ellos, pero pueden leer las señales de los bebés de la misma manera que lo hacen con los adultos. Sin embargo, con la supervisión adecuada, los gatos pueden aprender a ser amables con los bebés y crear relaciones positivas con ellos.
¿Las gatas saben cuándo sus dueños están embarazadas?
Es poco probable que las gatas sepan que sus dueñas están embarazadas, ya que las gatas no entienden el concepto de embarazo. Los gatos también pueden ser incapaces de detectar cambios físicos en sus dueños, ya que dependen principalmente de la vista y el olfato para identificar objetos o personas. La única diferencia que pueden notar son los cambios en el olor, ya que las hormonas en el cuerpo de una mujer que se producen en niveles más altos durante el embarazo pueden hacer que su olor natural con el que su gato esté familiarizado cambie.
Una palabra sobre tener gatos durante el embarazo
Aunque es posible que los gatos no reconozcan el embarazo de sus dueños, aún pueden ser un gran compañero durante este tiempo. Con la supervisión adecuada, los gatos pueden coexistir de manera segura con mujeres embarazadas y bebés. Además, los gatos pueden brindar apoyo emocional a sus dueños durante este momento especial de la vida. Solo asegúrese de no sacar ninguna caja de arena durante el embarazo, ya que las gatas pueden portar toxoplasmosis en sus heces, lo que puede causar problemas de salud graves en los fetos en desarrollo1
Otras preguntas frecuentes sobre gatos y bebés
P: ¿Tener un bebé estresa a un gato?
R: Depende. Los gatos pueden sentirse un poco abrumados o estresados cuando se presenta a un bebé en casa por primera vez, ya que no están acostumbrados a estas nuevas imágenes y sonidos. Sin embargo, con el tiempo, los gatos pueden aprender a adaptarse a medida que se acostumbran a la nueva presencia en el hogar.
P: ¿Cómo puedo ayudar a calmar a un gato estresado?
A: Ofrézcale a su gato sus golosinas o juguetes favoritos, cree un espacio seguro y cómodo para él lejos del bebé y pase tiempo de calidad con su gato todos los días. Además, trate de mantener la misma rutina tanto como sea posible y considere usar productos calmantes diseñados específicamente para gatos.
P: ¿Cómo puedo ayudar a mi gato a adaptarse a un bebé en casa?
A: Asegúrese de presentar a su gato gradualmente al bebé, brindándole mucho refuerzo positivo. Dale a tu gato su propio lugar especial para retirarse y bríndale atención y tiempo de juego adicionales. Lo más importante es que siempre supervise las interacciones entre los gatos y los bebés.
P: ¿Hay alguna medida de seguridad que deba tomar al presentar un gato a un bebé?
A: Supervise siempre las interacciones entre los gatos y los bebés, ya que los gatitos pueden morder o arañar por curiosidad. Además, mantenga la caja de arena alejada de las áreas que frecuenta el bebé.
P: ¿Tiene algún beneficio tener un gato en casa con un bebé?
R: Sí. Tener un gato en casa puede ayudar a los bebés a aprender sobre los animales y enseñarles bondad. Además, los gatos pueden brindar compañía y consuelo a los niños a medida que crecen, así como enseñar responsabilidad. Finalmente, tener gatos también puede reducir los niveles de estrés tanto en niños como en adultos.
P: ¿Hay algo más que deba saber sobre gatos y bebés?
A: Asegúrese de brindarle a su gato mucho amor, atención y amabilidad para ayudarlo a adaptarse a la presencia de un bebé en su hogar. Además, asegúrese de enseñar a sus hijos cómo interactuar de manera segura y respetuosa con los gatos para que todos puedan beneficiarse de las relaciones positivas.
Conclusión
Aunque es posible que los gatos no reconozcan a un bebé como algo separado de un adulto, aún pueden formar relaciones positivas con ellos. Con la supervisión adecuada, los gatos y los bebés pueden vivir juntos en armonía. Los gatos dependen principalmente de su sentido de la vista y el olfato para identificar objetos y personas, por lo que las diferencias entre un bebé y un adulto pueden ser demasiado sutiles para que los gatos las noten. Pero con el tiempo, los gatos aprenderán a convivir pacíficamente con un bebé.