Muchos dueños de mascotas están convencidos de que no necesitan cepillar los dientes de sus mascotas, pero aunque parezca difícil de creer,los dientes de su gato sí deben cepillarse.
Los dientes de los gatos necesitan cuidados al igual que los nuestros, pero la mayoría de las personas no piensan cepillar los dientes de sus gatos como lo hacen con los suyos. Masticar comida seca y juguetes brinda cuidado a los dientes de su gato, pero no lo suficiente como para prevenir la aparición de problemas dentales y mantener los dientes de su gato limpios.
Saber cómo cepillar los dientes de tu gato puede ayudar a prevenir problemas dentales y dolores innecesarios. Debes acostumbrar a tu gato al procedimiento de limpieza de dientes cuando es un gatito porque la mayoría de los gatos adultos no están demasiado abiertos a esta idea.
¿Se supone que debes cepillarle los dientes a tu gato?
Cepillar los dientes de tu gato es fundamental para mantener su salud bucal. A diferencia de los humanos, los gatos no se cepillan los dientes ni usan otros métodos para asegurarse de que sus dientes estén sanos. Aquí es donde sus dueños deben entrar en escena.
La buena noticia es que cepillar los dientes de tu gato no debería tomar más de 30 segundos por limpieza. Cuanto más cepille los dientes de su gato, más fácil será el proceso. Además, a largo plazo, cepillar los dientes de tu gato a diario es más económico que tratar los problemas de salud en el veterinario.
Entonces, ¿por qué deberías cepillarle los dientes a tu gato? Primero, la placa que queda en los dientes después de cada comida se acumula y se endurece, y en pocos días puede convertirse en sarro. Además de la placa y el sarro, cepillar los dientes de tu gato ayuda a prevenir la enfermedad periodontal (la inflamación de los tejidos que sostienen los dientes, que pueden destruir el hueso de la mandíbula) y la pérdida de dientes.
Además, la placa que se acumula en la boca de tu gato puede provocar gingivitis e infecciones orales. En los gatos adultos, las bacterias de la capa de sarro pueden diseminarse por el cuerpo, afectando los riñones y el corazón y, a menudo, provocando su mal funcionamiento.
¿Los veterinarios recomiendan cepillar los dientes de los gatos?
Los veterinarios recomiendan cepillar los dientes de los gatos para evitar enfermedades dentales y sus complicaciones. Independientemente de la etapa del sarro, los dientes de su gato deben cepillarse todos los días o al menos cada 2 o 3 días. Incluso si tu gato no quiere quedarse quieto, tienes que intentarlo. ¡Después de todo, se trata de la salud de tu mascota!
Usa siempre pasta de dientes especial para gatos, un cepillo de dientes/cepillo de dientes o una gasa. La pasta de dientes para humanos contiene demasiado flúor y otros ingredientes peligrosos para los gatos (como el xilitol, un edulcorante artificial) que pueden provocar varios problemas de salud (p.ej., vómitos y diarrea) si se traga.
Si el aliento de su gato se vuelve maloliente o el sarro cubre una gran superficie de los dientes, es hora de visitar al veterinario para un procedimiento de limpieza dental.
¿Qué pasa si no le cepillo los dientes a mi gato?
Si no le cepillas los dientes a tu gato, después de que se convierta en adulto (después de los 4 años), puede comenzar a desarrollar diversos problemas dentales.
Los signos más comunes de problemas dentales en gatos son:
- Mal aliento
- Inflamación de las encías (gingivitis)
- Dolor al tacto
- Negativa a comer
- Disminución del apetito debido al dolor
- Pérdida de dientes
La mayoría de los problemas dentales comienzan con la acumulación de placa o sarro. Los restos de comida crean una película pegajosa sobre los dientes que favorece el desarrollo de bacterias, dando lugar a la placa. Si la placa no se elimina en unos días, se calcificará y se formará sarro. El sarro es inicialmente un depósito delgado de color blanco o amarillento en la base del diente, que no tiene olor y no molesta a la mascota. Con el tiempo, sin embargo, este depósito pasa por varias etapas:
- La superficie del diente se cubre cada vez más de sarro.
- Empieza a producirse el mal aliento.
- La superficie del diente cambia de color de blanco/amarillo a amarillo oscuro y marrón.
- El mal aliento se vuelve molesto para el propietario.
- Las encías se inflaman y comienzan a retroceder.
- La raíz del diente queda expuesta.
- El diente comienza a moverse en el alvéolo dental y se caerá.
Para evitar estos problemas, es necesario cepillar los dientes de tu gato con regularidad.
¿Es demasiado tarde para cepillarle los dientes a mi gato?
Nunca es demasiado tarde para empezar a cepillar los dientes de tu gato. Si ves depósitos de sarro o tu gato tiene mal aliento, llévalo al veterinario para una limpieza dental. Puede comenzar una rutina de cepillado de dientes después del procedimiento.
No intentes quitar el sarro tú solo en casa. Es duro como una roca y corre el riesgo de fracturar los dientes de su gato o causar otros problemas. Este procedimiento solo debe ser realizado por un veterinario.
¿Con qué frecuencia debe un veterinario limpiar los dientes de mi gato?
Puedes llevar a tu gato a un chequeo dental una o dos veces al año, dependiendo de la dieta de tu gato y de la frecuencia con la que le cepilles los dientes. En otros casos, el veterinario recomendará la frecuencia con la que se deben realizar estas revisiones dentales.
Si nota problemas dentales (mal aliento, sarro, dientes flojos), lleve a su gato al veterinario inmediatamente.
Cómo cepillar los dientes de tu gato
Cepillar los dientes de tu gato no será fácil hasta que acostumbres a tu mascota a este procedimiento. ¡Con calma, paciencia y amor, lo lograrás!
Estos son los elementos que necesitará para cepillar los dientes de su gato:
- Cepillo de dientes (por lo general, los de mascotas son cepillos de dientes de dedo).
- Gasas (como sustituto del cepillo de dientes)
- Pasta dental especial.
Para comenzar el procedimiento, necesita que alguien sujete a su gato, o puede envolverlo en una toalla (si no quiere quedarse quieto).
Estos son los pasos que debes seguir:
- Ponga pasta de dientes en el cepillo de dientes o en la gasa (envuelta alrededor de su dedo).
- Mantén recta la cabeza de tu gato.
- Desliza el cepillo de dientes con la pasta debajo de las encías.
- Use los mismos movimientos de cepillado que usaría para cepillarse los dientes.
- Cepille los dientes de su gato suavemente durante 30 segundos.
- No aclarar.
Si su gato comienza a forcejear o a llorar, detenga el procedimiento y deje que se calme. Reanuda la operación cuando tu gato se haya vuelto a relajar.
Conclusión
Cepillar los dientes de tu gato no es fácil, especialmente si tu mascota no está acostumbrada a este procedimiento. Sin embargo, esta operación es importante porque puede prevenir la placa y el sarro, cuya acumulación puede provocar problemas de salud graves.
Debes cepillar los dientes de tu gato todos los días o, como máximo, cada 2 o 3 días. Utilice únicamente pasta de dientes especial para gatos. De lo contrario, corre el riesgo de enfermar a su mascota. Cepille los dientes de su gato suavemente durante unos 30 segundos. Si crees que algo anda mal con los dientes de tu gato, acude al veterinario.