El hecho de que tengas ganas de acurrucarte con tu mascota no significa que disfrute del contacto. Las aves son animales únicos con personalidades particulares. Algunos loros aman el contacto y la atención que reciben de sus dueños, mientras que otros prefieren que los dejen solos. Si su pájaro mascota no está inmediatamente interesado en sus caricias, intente entrenarlo para establecer confianza y acostumbrarlo a su toque. Hacer que se sientan cómodos y seguros es el aspecto más importante del proceso de caricias.
Especies de aves como loros, periquitos y periquitos son más propensas a permitir el contacto que otras aves A medida que continúe practicando este comportamiento, mantenga sus sesiones de entrenamiento cortas y preste atención a su lenguaje corporal para que pueda detenerse si comienza a sentirse abrumado.
Los 7 consejos para acariciar a un pájaro de forma segura
Antes de aprender a acariciar a su pájaro de la manera correcta, tenga en cuenta que algunos pájaros son individuos. Algunos amantes de las aves pasan meses tratando de que sus pájaros acepten su toque sin éxito. Cómo no a todos los humanos les gusta el contacto, ni tampoco a todas las aves.
Si trata de acariciar a un pájaro que no es suyo, comprenda que la mayoría de los pájaros requieren cierto nivel de confianza antes de permitir que alguien se acerque a ellos. Un completo extraño no va a tener mucho éxito en recibir afecto de ellos. Si eres el dueño del ave, dale algo de tiempo para que se encariñe contigo y estés dispuesto a aceptar sus límites.
1. Mantenga una conducta tranquila
Las aves son sensibles a las emociones de los demás. Mantén la calma mientras te acercas a ellos y asegúrate de que te vean a medida que te acercas. Háblale a tu pájaro mascota con voz suave antes de extender la mano. Haz movimientos lentos para no asustarlos. Cuanto más se entusiasman con tu presencia, mayores posibilidades de éxito.
2. Evaluar el lenguaje corporal del ave
El lenguaje corporal de los pájaros puede decirte mucho sobre cómo abordar una situación. Las aves se comunican de muchas maneras no verbales, por lo que debes observar cómo reaccionan. Los cuerpos rígidos y los ojos fijos son una buena indicación de que el ave se siente incómoda. Los pájaros cansados también pueden alejarse de usted o empujarlo, intentar morderlo o hacer mucho ruido.
Las aves que cierran los ojos, giran la cabeza o ahuecan las plumas son las que se sienten más cómodas. Estas son señales de que el pájaro confía en ti y se siente cómodo contigo cuando te acercas.
3. Sepa dónde acariciarlos
A pesar de lo tentadores que son sus cofres plumosos y esponjosos, no querrás acariciar a un pájaro debajo del cuello. Para muchas especies, este es el signo de un ritual de reproducción. Trate de mantener sus dedos alrededor de la espalda, las alas o la cola para minimizar los problemas de comportamiento.
4. Comienza en el pico del pájaro
Un pájaro experimenta mucho a través de su pico. Estas son herramientas que usan para saborear, trepar, sentir y abrir objetos duros. Comience a entrenar a su pájaro para que lo acaricie tocando suavemente su pico y permitiéndole que se acostumbre a usted.
5. Ve en la dirección de las plumas
Las aves tienen plumas que viajan en una dirección. Ir en contra de la dirección natural de sus plumas podría lastimar a las aves y alejarlas de futuras sesiones de caricias. Mueva siempre los dedos en la misma dirección y use un toque suave para mostrarles que no los lastimará.
6. Aumente el tiempo mientras se relajan
Comienza a acariciar a tu ave en incrementos muy cortos y solo aumenta el tiempo después de que empiecen a estar más relajados a tu alrededor. Cuando te alejes del pico, comienza en la parte posterior de la cabeza o debajo del pico sin pasar por debajo del cuello.
7. Permanecer paciente
Los pájaros requieren un poco de tiempo para conocerte y confiar en ti. Cuanto más seguros se sientan, más probable es que te permitan acariciarlos. Con el tiempo, y después de establecer un vínculo, se sabe que a algunas aves les encanta acurrucarse y prefieren pasar tiempo al lado de su dueño.
Reflexiones finales
Aunque puede ser un poco desgarrador, algunos dueños de pájaros tienen que aceptar que tienen un pájaro que está lleno de independencia y disfruta de su propio espacio. El afecto es agradable, pero no tanto como saber que nuestras mascotas son felices. Siempre puede trabajar para que su mascota se sienta más cómoda al manipularla. Incluso si no lo toleran durante períodos prolongados, es posible ganar la suficiente confianza como para que lo toleren durante ataques rápidos.