Los perros, al igual que sus contrapartes humanas, pueden sufrir episodios ocasionales de hipo. La mayoría de las veces, el hipo de los perros es perfectamente normal y se resolverá en unos minutos. El hipo tiende a ser más común en cachorros y perros jóvenes y rara vez es motivo de preocupación. Pero, ¿por qué los perros tienen hipo? ¿Qué los causa? ¿Y cuándo deberías preocuparte de que tu perro tenga hipo?El hipo en perros y cachorros es causado por una rápida contracción del diafragma.
¿Qué es el hipo del perro?
El diafragma es una capa de músculo que separa el tórax del abdomen y ayuda a tu cachorro a respirar. Cuando un perro inhala, el diafragma se contrae y se mueve hacia abajo, aumentando el espacio en la cavidad torácica para que los pulmones se llenen de aire. Cuando un perro exhala, el diafragma se relaja y hace que la cavidad torácica sea más pequeña, expulsando el aire de los pulmones.
El movimiento del diafragma es suave y rítmico. Sin embargo, cuando se contrae de forma repentina o irregular, el resultado es un pequeño espasmo del músculo y el consiguiente hipo. El músculo del diafragma está controlado por varios nervios, uno de los cuales se llama nervio frénico. Este nervio se encuentra muy superficialmente en el diafragma y puede irritarse por los movimientos del estómago y los intestinos que se encuentran cerca. Esto es particularmente cierto si el estómago está lleno de gas o aire.
El hipo puede ser único u ocurrir en rápida sucesión si se repite la contracción del diafragma. La mayoría del hipo en los perros es silencioso, y principalmente vemos que su barriga y su pecho se mueven rápidamente. Sin embargo, si se expulsa aire a través de la glotis o las cuerdas vocales al mismo tiempo, se puede notar un pequeño sonido de "hip" o tos.
¿Por qué los perros tienen hipo?
El hipo ocurre cuando el diafragma está irritado, lo que provoca un breve espasmo involuntario del músculo. La razón más común de esto en los perros es beber o comer demasiado rápido, lo que hace que su perro ingiera aire junto con su comida o agua. El aire y la comida se mezclan en el estómago de su perro, lo que hace que se expanda con gas e irrite el diafragma a medida que el estómago se contrae y se mueve para digerir la comida. La excitación, el estrés o los jadeos también pueden provocar un ataque de hipo.
Los cachorros tienen más probabilidades de tener hipo que los perros mayores. Los cachorros a menudo comen más rápido que los perros adultos y son más juguetones y enérgicos, lo que hace que ingieran más aire. Esta acumulación de gas dentro del estómago puede irritar el diafragma. Los perros jóvenes también tienen menos grasa dentro del abdomen y, por lo tanto, menos relleno alrededor del estómago para absorber algunos de sus movimientos. Los cachorros naturalmente respiran más rápido que los perros adultos y sus músculos son más débiles y se cansan más fácilmente, lo que hace que las contracciones del diafragma y el hipo sean más probables.
¿El hipo lastima a los perros?
Es poco probable que el hipo le cause dolor o malestar a su perro. La mayoría de los ataques de hipo se resuelven en unos pocos minutos y son poco más que una molestia para tu perro. La mayoría de los perros permanecerán tranquilos durante los episodios de hipo y no mostrarán signos de angustia o incomodidad. Si su perro muestra signos de angustia, como caminar demasiado, jadear o estar inquieto, o molestias abdominales como estirarse, voltearse para mirar el abdomen o dolor al tocar su abdomen, entonces es recomendable buscar atención veterinaria.
Las 3 formas de eliminar el hipo en los perros
Hay muchas sugerencias sobre cómo eliminar el hipo en las personas, aunque es poco probable que muchas de ellas funcionen para nuestros compañeros caninos. ¡Es poco probable que puedas pedirle a tu perro que contenga la respiración y cuente hasta diez! Ciertamente no se recomienda asustar a su perro. Pero, ¿qué podemos hacer que funcione?
1. Calma la respiración irregular
Ayudar a ralentizar la respiración de tu perro ralentizará el movimiento del diafragma y reducirá sus contracciones. Anima a tu perro a que se acueste y se relaje. Evite el ejercicio o la excitación. Tal vez ofrecerles un masaje en la barriga para fomentar la relajación.
2. Bebe agua
Beber agua ayudará a reducir los gases en el estómago y permitirá que los movimientos del estómago se asienten. Anima a tu perro a beber con calma y despacio.
3. Reduzca la velocidad de las comidas
Si tu perro es propenso a tener hipo porque come o bebe demasiado rápido, trata de hacerlo más lento. Intenta esparcir la comida de tu perro por el suelo o usa un plato de comida lenta para evitar que se trague la comida.
¿Cuándo debería preocuparse por el hipo del perro?
En casos excepcionales, los episodios prolongados de hipo o los episodios frecuentes de hipo pueden ser una señal de que algo no va bien.
Es recomendable buscar atención veterinaria lo antes posible si observa alguno de los siguientes:
Su perro parece tener dolor o está angustiado
Jadear, caminar de un lado a otro, estirarse o darse la vuelta con frecuencia para mirarse la barriga pueden ser signos de dolor abdominal.
Tu perro babea en exceso
Esto podría ser un signo de náuseas, dolor abdominal o ingestión de toxinas.
A tu perro le cuesta respirar con hipo
Cualquier cambio en el patrón de respiración de su perro, por ejemplo, si se vuelve más dificultoso o más rápido de lo normal, debe investigarse más a fondo. Su perro se cansa más fácilmente o no puede hacer ejercicio cuando tiene hipo también podría ser motivo de preocupación.
Tu perro empieza a vomitar después de tener hipo
Esto podría ser un síntoma de malestar estomacal o ingestión de toxinas.
La mayoría de los ataques de hipo en perros y cachorros no requieren ninguna intervención. Sin embargo, si le preocupa que su cachorro se sienta incómodo o que el hipo se esté convirtiendo en algo habitual para su amigo peludo, entonces una visita a su veterinario podría estar en orden.