Los gatos son criaturas increíblemente ingeniosas y ágiles. Dependen de la agilidad, las articulaciones fuertes y los músculos poderosos para sobrevivir y prosperar. Desafortunadamente, los felinos pueden sufrir osteoartritis (comúnmente llamada artritis), una degeneración de las articulaciones que causa dolor a la mascota y limita sus habilidades. Es una enfermedad degenerativa que afecta al 90 % de los gatos mayores (a partir de los 12 años).
Afortunadamente, hay bastantes consejos y trucos comprobados que puedes usar para ayudar a tu bebé peludo a sobrellevar la artritis. Estamos hablando de camas ortopédicas, almohadillas térmicas y medicamentos para el control del dolor, por nombrar algunos.¡Únase a nosotros y hablemos de todo lo que podemos hacer para ayudar a nuestras bolas de pelo en su lucha contra la inflamación de las articulaciones!
¿Qué es la artritis? ¿Cómo afecta a los gatos?
Cuando hablamos de artritis en gatos, nos referimos principalmente a la osteoartritis. Esta condición (a menudo llamada enfermedad degenerativa de las articulaciones) es causada por el desgaste "mecánico" de los huesos/articulaciones. En la mayoría de los casos, la artritis se dirige a las caderas, las rodillas, la columna vertebral y los codos de un gato, pero también puede verse afectada cualquier articulación. Y cuanto más tiempo se deja sin tratar, más graves se vuelven los síntomas.
Una de las principales causas de la artritis en los gatos es la edad, pero otras cosas pueden desencadenarla, entre ellas:
- Genética
- Peso extra
- Displasia de codo
- Luxación de rótula
- Trauma físico
Signos comunes de inflamación articular en felinos
Los signos de la artritis pueden ser muy sutiles al principio, pero es posible que note una disminución de la actividad, rigidez al andar, cojera leve, f alta de apetito, lloriqueos por la noche y otros cambios en el comportamiento de la mascota. Estos son los efectos secundarios más comunes de la inflamación de las articulaciones en un gato:1
- Tiene articulaciones adoloridas o rígidas
- Baja energía/actividad, poco o ningún deseo de jugar
- Más lloriqueos, llanto e irritación/ansiedad
- Cojea y rara vez s alta hacia arriba o hacia abajo
- Se vuelve más difícil para la mascota correr
- Necesita más tiempo para dormir que antes
- Ya no le gusta que lo recojan
- Actos aleatorios de agresión hacia mascotas/humanos
- Pérdida de apetito
- Rara vez se arregla solo
Los 7 trucos y consejos para ayudar a un gato con artritis
1. Comience con una cama ortopédica
Los gatos son grandes fanáticos de dormir, dormir siestas e incluso fingir que duermen. En promedio, pasan entre 12 y 18 horas durmiendo. Y si el gato sufre de artritis, probablemente necesitará descansar aún más. Es por eso que los veterinarios recomiendan comprar una cama ortopédica en el momento en que a su gato se le diagnostica inflamación articular.
La cama debe ser suave y la mascota no debe hacer ningún esfuerzo para entrar y salir. Evite comprar una cama que sea demasiado alta para que la alcance un gato con articulaciones problemáticas. Es cierto que siempre puedes echar una mano, pero al campeón peludo todavía le gustaría subirse a la cama por su cuenta. Proporcione al gato rampas que conduzcan a su cama, sofá favorito, estantes y asientos junto a la ventana.
2. Invierte en una almohadilla térmica para gatos
A nuestros compañeros esponjosos les gusta mantenerse calientes. Se acomodan en los lugares más suaves y cálidos de la cama o el sofá, suben a los estantes superiores o descansan en el techo para tomar el sol. Una almohadilla térmica para gatos debe mantener a la mascota cómoda mientras sufre de artritis. No te preocupes; no tendrás que gastar una fortuna en ello.
En promedio, una almohadilla para gatos de buena calidad solo te costará entre $20 y $40 o menos. Busque una almohadilla con opciones de temporizador, diferentes configuraciones de temperatura y una funda lavable. El terciopelo suave y la lana son los mejores materiales para una almohadilla, ya que mantendrán al gato cómodo. La función de apagado automático, el refuerzo de goma y el cable de acero inoxidable también serán útiles.
No deje a su gato sin supervisión cuando use una esterilla térmica y realice comprobaciones periódicas para asegurarse de que funciona correctamente. Utilice únicamente los destinados a los animales. Las almohadillas eléctricas para humanos pueden calentarse demasiado y causar quemaduras.
3. ¡No olvides cortarles las uñas
No importa cuán difícil sea la vida de su gato debido a la inflamación de las articulaciones, aún debe seguir un estricto programa de aseo. Eso incluye el cepillado regular y la limpieza de los dientes de la mascota. Tu gato no podrá acicalarse como antes, ya que intentarlo podría provocarle movimientos dolorosos.
Los gatos con artritis también tienen más dificultades para rascarse y limarse las uñas. Presta atención a las garras del gato. Si crecen demasiado, pueden incrustarse en las almohadillas de su gato. Las uñas largas dificultan el movimiento de un capullo peludo. Entonces, ¿con qué frecuencia debes hacerlo? En promedio, se recomienda recortar las patas de la bola de pelo una vez cada 2 o 3 semanas.2
4. Implementar ejercicio moderado
Para mantener la masa muscular y las articulaciones activas, el veterinario de su gato puede recomendarle sesiones de ejercicio cortas y moderadas una o dos veces por semana. Sin embargo, si la inflamación es severa, eso le causará dolor a la mascota en lugar de arreglar cualquier cosa. Por lo tanto, a menos que el veterinario le dé luz verde, no obligue a su gato a hacer ejercicio.
5. Mantener todo en el primer piso
Cuando un gato sufre de artritis, incluso las cosas más básicas, como caminar, pueden hacer que se sienta incómodo o lastimar sus articulaciones. Por eso es necesario tener todo al alcance de la mano. Y con eso nos referimos a sus cuencos (tanto para la comida como para el agua) y la caja de arena. Si el gato quiere, intentará superar distancias más largas alrededor de la casa para estirar las patas.
Pero no debería tener que hacer un gran esfuerzo para conseguir algo de comida o agua. Las rampas solo son necesarias para camas/estantes. Para los tazones, todo lo que tienes que hacer es colocarlos en un lugar ligeramente elevado. En cuanto a la caja de arena, asegúrate de que tenga lados muy bajos o múltiples entradas y que el gato no se vea obligado a moverse para encontrar la puerta o s altar dentro y fuera. Además, haz que todas las superficies de la casa sean antideslizantes.
6. Manténgalos en forma
Si tu bebé peludo se siente decaído o deprimido mientras trata de lidiar con la artritis, depende de ti mantener el ánimo en alto. Y una de las mejores maneras de hacerlo es tratarlo con deliciosos bocadillos. Demostrar que te importa es tan importante como dejar que mastique un paquete de golosinas crujientes.
Con eso, sea muy consciente de la ingesta de calorías de la yema de la piel. La obesidad es un gran problema para los felinos domésticos, pero para un gato con artritis es un desastre. Toda esa presión extra sobre las articulaciones empeorará mucho las cosas para el felino. Por lo tanto, mantenga un equilibrio estricto entre tratar a la mascota y ayudarla a mantener o perder peso. Y al igual que con los medicamentos y tratamientos, habla con un veterinario para que te indique la dieta adecuada.
7. Hable con un veterinario sobre medicamentos para aliviar el dolor
¡Ver nuestras bolas de pelo favoritas sufrir de inflamación articular es lo peor! Pero nos complace decir que existen bastantes medicamentos aprobados por veterinarios que alivian el dolor. Entonces, después de instalar la cama ortopédica y tratar al gatito con una almohadilla térmica, consulte con su veterinario acerca de estos medicamentos.
Atención médica y de apoyo para la artritis felina
La osteoartritis es una enfermedad degenerativa dolorosa, y progresa un poco diferente en cada gato. Por lo tanto, los remedios caseros como los analgésicos y los cambios en el entorno no siempre podrán producir los resultados deseados. En ese caso, su veterinario puede recomendar agregar otras opciones al plan de tratamiento de su gato:
- CLT (Terapia con Láser Frío). Este es un tratamiento no invasivo. Los doctores de animales aplican terapia con láser frío (terapia de luz) a las articulaciones afectadas y pueden ayudar a eliminar el dolor. Al principio, tendrás que visitar al veterinario con mucha frecuencia, pero después de eso, las sesiones de CLT no serán tan frecuentes.
- Acupuntura Sí, la acupuntura se usa a menudo para combatir la osteoartritis. Desafortunadamente, no hay muchos casos exitosos de "tratamiento con agujas" que ayuden a un felino a recuperarse de una enfermedad articular degenerativa. Pero vale la pena intentarlo ya que podría ser la solución adecuada para tu gato.
- SCT (terapia con células madre). En muchos sentidos, SCT es un tratamiento experimental, aunque muy eficaz. Ha demostrado ser fundamental para ayudar contra la artritis en humanos, perros y caballos. Actualmente, todavía se considera experimental, pero con el paso del tiempo, esto podría cambiar. La cirugía, aunque poco común, podría ser el tratamiento más efectivo para algunos gatos. Si una articulación ha sufrido un daño severo y le está causando dolor crónico a tu gato, la cirugía puede ser la única solución para que la mascota se sienta casi como nueva.
- Cirugía. La cirugía, aunque poco común, podría ser el tratamiento más efectivo para algunos gatos en situaciones muy específicas. Si una articulación ha sufrido un daño severo y le está causando dolor crónico a tu gato, la cirugía puede ser la única solución para que la mascota se sienta casi como nueva.
Estas opciones solo las puede decidir su veterinario después de un examen exhaustivo de su gato.
¿Qué razas de gatos son propensas a la artritis?
Desafortunadamente, ciertas razas tienen una mayor probabilidad de contraer artritis debido a una predisposición hereditaria. Estos felinos experimentan inflamación articular a una edad más temprana en comparación con otras razas. Y, cuando no se trata, la artritis se convierte en un problema mucho mayor para ellos. La lista incluye gatos siameses, main coons y persas, por nombrar algunos.
La buena noticia es que si revisa al gato al menos una vez cada 6 a 12 meses, el veterinario debería poder detectar la artritis en una etapa temprana. La detección temprana ayudará al miembro de cuatro patas de la familia a evitar la cirugía, sin mencionar que hará su vida mucho más fácil. Aquí hay una lista completa de las razas de gatos con un mayor riesgo de artritis:
- Maine Coon
- Persa
- Pliegue escocés
- siamesa
- Himalaya
- Abisinio
- birmano
- Devon Rex
Conclusión
La artritis es una de las enfermedades más comunes de los gatos. Cuando no se trata, puede hacer que el gatito se sienta deprimido y sin vida, sin mencionar que puede provocar un dolor insoportable. Sí, es una afección muy grave y nosotros, como padres de gatos, tenemos la obligación de hacer todo lo que esté a nuestro alcance para ayudarlos y mejorar sus vidas.
Hoy, aprendimos cómo hacerle la vida un poco más fácil a un gato con artritis manteniéndolo abrigado, acogedor, bien alimentado y aseado. En cuanto a los tratamientos, antes de pensar en medicamentos, ¡asegúrate de hablarlo todo con un veterinario!