Los gatos Maine Coon son una de las razas de gatos más queridas en los Estados Unidos, y no es de extrañar por qué: son gigantes suaves y esponjosos a los que les encanta jugar y se llevan bien con otras mascotas y humanos.
Sin embargo, hay una peculiaridad que tienen los Maine Coon que a menudo sorprende a la gente:A los Maine Coon les encanta el agua.
A diferencia de la mayoría de los gatos, los Maine Coon parecen disfrutar mucho mojándose. Salpicarán sus patas en sus tazones de agua, jugarán con un grifo abierto e incluso s altarán a la bañera o se ducharán con sus dueños.
Entonces, ¿por qué a los Maine Coon les encanta tanto el agua? Veamos algunas explicaciones posibles.
Las 3 razones por las que a los gatos Maine Coon les encanta el agua
1. Sus antepasados procedían de un clima frío y húmedo
Los Maine Coons se originaron en el estado nevado de Maine (de ahí su nombre), lo que explica en parte por qué evolucionaron hasta convertirse en gatos tan grandes y esponjosos.
Sin embargo, también se cree que son descendientes de la majestuosa raza de gatos del bosque noruego. Los gatos del bosque noruego son conocidos por sus gruesos pelajes resistentes al agua, que les ayudaron a sobrevivir en el clima frío y húmedo de su tierra natal. Esto también significa que se sienten más cómodos mojándose que otros gatos, un rasgo que los Maine Coon pueden haber heredado.
2. Su pelaje repelente al agua les ayuda a mantenerse secos
Los Maine Coons tienen dos capas de pelaje: una capa interna suave y aislante y una capa externa gruesa. Esta doble capa de pelo está diseñada para mantenerlos calientes en climas fríos y secos en condiciones de humedad. También es resistente al agua, lo que significa que los Maine Coons no tienen que preocuparse de que su pelaje se empape cuando s altan en un charco o juegan con una manguera abierta.
3. Los Maine Coon son curiosos y aventureros por naturaleza
Los Maine Coon son gatos muy inteligentes y curiosos, y esta curiosidad se extiende a las actividades relacionadas con el agua.
Cosas como abrir grifos, inodoros, duchas, peceras e incluso piscinas son fascinantes para ellos. ¡Es difícil resistirse a esos divertidos reflejos, sonidos interesantes y la forma en que se mueve el agua!
Además, los Maine Coon son conocidos por ser gatos particularmente aventureros. Les encanta explorar y siempre están listos para un nuevo desafío, por lo que no sorprende que no duden en investigar ese gran charco en el patio trasero.
¿Pueden nadar los gatos Maine Coon?
Ahora sabemos que el agua es sinónimo de diversión para los Maine Coons, pero ¿realmente pueden nadar?
¡La respuesta es sí! Los Maine Coon pueden nadar, y hay toneladas de videos en línea de ellos chapoteando en bañeras, lagos y otros cuerpos de agua.
Dado que su pelaje repele el agua, no se mojan tanto como otros gatos cuando nadan, y sus largas colas les ayudan a conducir y mantener el equilibrio mientras están en el agua.
¿Los Maine Coon necesitan baños?
Ya que estamos en el tema de las bañeras, es posible que se pregunte si necesita bañar a su Maine Coon.
La respuesta suele ser no, especialmente cuando tienes un gatito exclusivamente de interior. Los gatos son excelentes para acicalarse y por lo general mantendrán su pelaje limpio y libre de enredos.
Dado que los Maine Coon tienen un pelaje resistente al agua, no tienden a ensuciarse tanto como otros gatos. Si se ensucian un poco, normalmente todo lo que necesitan es limpiarlos rápidamente con un paño húmedo.
Sin embargo, hay algunas excepciones. Si su Maine Coon tiene una condición que afecta su capacidad para arreglarse, es posible que deba bañarlo regularmente. Por ejemplo, algunos gatos con diabetes o artritis pueden tener dificultad para llegar a todas las partes de su cuerpo para limpiarlas adecuadamente. En estos casos, los baños regulares pueden ayudar a mantener a tu gatito limpio y saludable.
Es posible que también debas bañar a tu Maine Coon si se mete en algo muy sucio o maloliente, como aceite, pintura o basura. Si esto sucede, asegúrese de usar un champú suave para gatos y evite que les entre agua en los oídos y los ojos.
Ya sea que decidas bañar a tu Maine Coon o no, asegúrate de mantener su pelaje limpio y bien cuidado. Después de todo, es parte de lo que les permite disfrutar tanto del agua.
Estos son algunos consejos a tener en cuenta:
- Cepille el pelaje de su Maine Coon regularmente para eliminar la suciedad, los desechos o los nudos.
- Use herramientas para quitar el pelo para ayudar a reducir la caída de pelo y las bolas de pelo y mantener sus abrigos
- Córteles las uñas regularmente para evitar que crezcan demasiado y que sus garras no queden atrapadas en las cosas.
- Límpielos con un paño húmedo después de que hayan estado afuera para eliminar el polen, la suciedad u otros alérgenos ambientales.
- Si decide bañar a su Maine Coon, use un champú suave para gatos. Mejor aún, use un champú suave para quitar pelusas para reducir aún más la muda.
- Llévalos a un chequeo veterinario si notas algún cambio en sus hábitos de aseo. Algunos ejemplos son el desprendimiento excesivo, las zonas calvas o los cambios en la textura de su pelaje. Estos podrían ser signos de una condición médica que necesita tratamiento.
Reflexiones finales sobre los Maine Coons y el agua
La próxima vez que veas a tu Maine Coon jugando en un charco o metiendo la pata en el inodoro, no te alarmes. Este es un comportamiento perfectamente normal en estos gatitos curiosos y aventureros.
En su lugar, intenta unirte a la diversión. Solo asegúrate de vigilarlos y supervisar su tiempo de juego en el agua en todo momento.