Los pomeranianos son conocidos por sus característicos pelajes esponjosos, estaturas diminutas, conquista de corazones y éxito en las exposiciones caninas. Pero, como muchas razas de juguetes, ¡su capacidad para jugar bien con los demás puede tomar tiempo para determinar! A diferencia de otros perros de juguete, losPomeranians generalmente se consideran valientes y audaces pero amigables, lo que significa que probablemente serán buenos con los gatos (perros expertos) en el hogar.
Sin embargo, la capacidad de tu Pom para llevarse bien con tu gato viene con algunas advertencias. ¡Sigue leyendo para saber cuáles son y qué podría influir en qué tan bueno será un Pomerania con tu gato!
¿Cómo son los pomerania con los gatos?
Normalmente, los pomerania son amigables con los gatos. Por lo general, están dispuestos a interactuar y vincularse con ellos, ya que fueron criados para la amistad y el compañerismo. Los pomerania son pequeños y extrovertidos, con personalidades amistosas y abiertas que suelen combinar bien con otras mascotas en el hogar.
No son conocidos por tener un gran impulso de persecución, y son leales y cariñosos con sus familias. Estas cualidades hacen que sea más probable que un Pom se lleve bien con tu gato, ¡pero su vivacidad y energía pueden ser demasiado para algunos gatos tranquilos!
La misma dinámica de pomerania y gato diferirá con cada emparejamiento porque el Pomerania y el gato son individuos. A algunos pomerania nada les encantará más que acurrucarse junto a un gato y hacer todo juntos. Sin embargo, puede haber Poms con instintos de presa más altos que no pueden evitar perseguir a todos los gatos que ven.
¿Cómo puedo ayudar a mi Pomerania a ser bueno con mi gato? 4 pasos clave
Las buenas presentaciones son fundamentales para una relación positiva y duradera entre gatos y perros. Una introducción lenta y constante puede brindarle la mejor oportunidad de prepararse para el éxito.
1. Antes de empezar
Antes de traer un nuevo pomerania o gato a la casa, establezca un lugar para que cada mascota escape si es necesario. Los gatos, en particular, necesitarán un lugar para alejarse de tu Pom si las cosas se ponen demasiado estresantes. Los lugares altos son ideales para que tu gato llegue si necesita apartarse rápidamente del camino de tu Pomerania, y pueden ayudar a que tu gato se sienta seguro.
Tendrás que estar presente para monitorear todas las interacciones durante el primer mes más o menos. Al elogiar amablemente a sus mascotas y hablarles con calma, puede ayudarlas a sentirse seguras durante los períodos de interacción y ayudarlas a mantener la calma.
2. Preséntalos desde lejos primero
Cuando traigas a tu nuevo gato o pomerania a casa por primera vez, asegúrate de que estén separados y no puedan verse. El objetivo es que ambos se acostumbren a la presencia del otro sin interacción cara a cara, ya que de esta manera puedes controlar mejor la calidad de las interacciones y crear asociaciones positivas. Además, tu gato y Pom podrán oírse y olerse a través de las puertas cerradas, por lo que mantenerlos en habitaciones separadas es una buena manera de comenzar las presentaciones de manera segura.
Alimentar a tu gato y a tu pomerania en lados opuestos de la puerta es un buen punto de partida para las presentaciones, ya que se escucharán y se olerán, pero comenzarán a asociar esto con cosas buenas (comida deliciosa). Comience colocando los tazones lejos de la puerta y acérquese más y más cada vez. Al final del proceso, tu gato y tu Pomerania deberían estar comiendo tranquilamente contra la puerta.
3. Iniciar reuniones presenciales
Cuando tus mascotas estén comiendo tranquilamente en la puerta, puedes presentarlas en sesiones cortas. Asegúrate de que esto se haga en una parte "neutral" de la casa que esté lejos de las áreas seguras de tu gato o Pomerania. Mantenga la calma y no sujete a ninguna de las mascotas, ya que esto puede causar tensión o provocar lesiones. Tener a tu Pom con la correa floja es una buena idea, así tienes el control si algo sale mal, pero permite que tu gato vaya y venga cuando quiera.
Míralos de cerca y ten golosinas a mano como recompensa por su comportamiento tranquilo. Pedirle a tu Pom que se siente o se acueste es una excelente manera de calmarlo. Si nota algún signo de agresión, distráigalo y vuelva a la etapa anterior del proceso.\
4. Repetir, repetir, repetir
Estas sesiones deben realizarse diariamente durante más tiempo cada vez. Tómese su tiempo con esta etapa, ya que las interacciones lentas y constantes son la mejor manera de ayudar a su Pomerania a ser bueno con su gato. Cuando creas que está listo y no se han observado signos de agresión, puedes quitarle la correa a tu pomerania y dejar que deambule libremente por la habitación. Es mejor no dejar a su gato y Pom solos sin supervisión, ya que aún pueden ocurrir incidentes y cualquiera de las partes puede resultar lesionada.
¿Mi pomerania y mi gato se llevan bien?
Los gatos y los perros tienen métodos complejos de comunicación, y es posible que no siempre se traduzcan bien entre las especies. Sin embargo, hay algunos signos positivos y negativos reveladores que los humanos pueden entender.
Señales de que tu pomerania y tu gato se llevan bien
Algunos signos de que la relación va bien y que tu gato y Pomerania se están uniendo son.
Señales de que sus mascotas coexisten pacíficamente:
- Durmiendo juntos
- Alogrooming (lamer/permitir que el otro los lama)
- Jugar (no confundir con pelear)
- Siguiéndose unos a otros de forma relajada
- Lenguaje corporal general relajado
Recuerda que aunque tu Pomerania y tu gato se hayan llevado bien durante mucho tiempo, siguen siendo animales. Todavía pueden cruzar los cables o traspasar algunos límites y pueden actuar agresivamente entre sí.
Señales de que tu pomerania y tu gato no se llevan bien
Los signos de agresión en perros y gatos suelen ser pronunciados y fáciles de reconocer, y muchos de ellos vendrán del miedo. Los perros tienen una inclinación natural a perseguir cosas pequeñas y peludas, y los gatos tienden a correr. Es esencial reconocer los primeros signos de agresión en cualquiera de las especies para asegurarse de que ambos miembros de la familia estén a salvo y puedan comenzar a trabajar en la relación.
Señales de que tu pomerania y tu gato no se llevan bien:
- Gruñidos
- Lunging
- Silbidos o ladridos
- Se erizaron los pelos
- Deslizar
- Pupilas dilatadas (en gatos) y ojos blancos (en perros)
- Cargando
- Orejas aplanadas
¿Qué hago si mi pomerania no se lleva bien con mi gato?
Si tu Pomerania y tu gato no se llevan bien, puedes pedirle consejo a tu veterinario. Deberían poder darte consejos y remitirte a un especialista en comportamiento animal que pueda ayudarte a lidiar con la agresión, pero a veces estos problemas no se pueden superar.
Se pueden hacer mejoras en la relación, pero hay situaciones en las que el mejor resultado para todos los involucrados es, lamentablemente, reubicar al gato o al pomerania.
Reflexiones finales
Los Pomeranians son una raza de juguete y son muy sociables por naturaleza, y la mayoría debería ser bueno con los gatos si se les presenta correctamente. Cada relación dependerá de las personalidades de los individuos, ya que algunos gatos no tolerarán a los perros y viceversa. Debido a que los Poms son pequeños, pueden parecer menos amenazantes para los gatos y, por lo tanto, estar mejor posicionados para vincularse con ellos, pero no confíe en esto.
A pesar de su pequeño tamaño, un Pomerania fácilmente podría causar daño a un gato, y un gato podría dañar gravemente a un Pom. Sin embargo, si todas las presentaciones se realizan correctamente, es de esperar que tu perro y tu gato vivan una vida pacífica y feliz juntos.